jueves, 24 de febrero de 2022

El Papa convoca una jornada mundial de oración y ayuno por la paz en Ucrania

 

Con voz entrecortada y gran dolor de corazón, el Papa Francisco, profeta de la paz, volvió a pedir que cesen los tambores de guerra.

 

 Todos estamos llamados, el próximo día 2, a unirnos en oración por la paz. Pero ya, desde ahora, tenemos que intensificar nuestra oración, pues las amenazas de guerra ya se han cumplido.

 

sábado, 5 de febrero de 2022

Día de la Vocación Franciscana

 El próximo domingo 6 de febrero, celebramos el día de la vocación franciscana que tiene como lema: “Como Francisco, siendo luces en el camino ¡Comencemos!”

 

 Se nos invita a ser luces en el camino, como Francisco y Clara. Tenemos que comenzar a Caminar, dejando que el Señor ilumine nuestros pasos y ser reflejos de esa luz para los hermanos y hermanas.

 Aunque el camino de seguimiento no es fácil, es una aventura llena de desafíos que nos exigen tomar las riendas de nuestra vida para seguirle, haciendo un serio discernimiento.

 

 Pedimos al Señor la valentía que tuvieron Francisco y Clara para ponernos en marcha de manera firme y alegre, para descubrir la misión que el Señor nos tiene reservada, para descubrir donde reside nuestra verdadera felicidad.

 Para consultar los materiales: www.ofminmaculada.org

 

miércoles, 2 de febrero de 2022

Caminando juntos

 Este es el lema con el que la Iglesia celebra el 2 de febrero la Jornada de la Vida Consagrada. Así, los consagrados nos unimos al camino sinodal.

 Los obispos dicen en su mensaje: Mientras avanzamos en el camino sinodal, damos gracias a Dios por el don de la vida consagrada que enriquece a la Iglesia con sus virtudes y carismas, y le muestra al mundo el testimonio alegre de la entrega radical al Señor.

 Caminar juntos en la consagración: Ser conscientes de la llamada recibida, la vocación compartida y la vida entregada. A Dios solo se le encuentra caminando.

 Caminar juntos en la escucha de la Palabra de Dios: Agudizar el oído para escuchar al Espíritu, a los hermanos con los que se comparte la vida y a la humanidad herida, es la mejor garantía para caminar juntos por las sendas de la fidelidad a la propia vocación.

 Caminar juntos en la comunión: Los consagrados están llamados a ser en la Iglesia y en el mundo expertos en comunión.

 Caminar juntos en la misión: Supone descubrir la dulce y confortadora alegría de evangelizar, y experimentar simultáneamente la alegría de creer y el gozo de comunicar el Evangelio. Los consagrados contribuyen a enriquecer la misión de la Iglesia e incluso a posibilitar que la semilla del Evangelio pueda llegar a ámbitos mucho más profundos.